Sin duda alguna, es el mejor hotel que me he hospedado en mi vida. He estado en muchísimos hoteles y de diferentes cadenas, inclusive he estado en varios Fiesta Americana pero en este hotel, el servicio es impresionantemente excelente. Todos son muy atentos y serviciales, desde que llegas te reciben con una sonrisa, en el estacionamiento, en el lobby, en la recepción y te explican todo con lujo de detalles. En la recepción, la atención tan perfecta y especial de Yaretzi hizo sentirme muy especial y sobretodo que el Check-In fue muy rápido y me asignaron de manera inmediata mi habitación. Los espacios en el hotel son perfectos ya que no se tiene que caminar largas distancias para llegar a los servicios que brinda el hotel, todo queda a la mano. También me encantó la excelente ubicación que tiene el hotel ya que puedes ir caminando a los puntos de interés más importantes de la ciudad y tienes muchos servicios alrededor. También si quieres utilizar tu auto, cuenta con excelentes accesos para recorrer la ciudad y llegar y salir sin problema al hotel.
Otra de las cosas que me sorprendió enormemente, fue la paz con la que puedes estar en sus jardines y más en la alberca. Se me hizo perfecta la temperatura del agua y sobretodo que tiene buena profundidad y que no es tan pequeña, creo que después del servicio, su alberca fue lo mejor.
La comodidad en las habitaciones es excelente, la cama, las sabanas y sus almohadas son una delicia y la vista que tenía hacía el jardín fue maravillosa, agradezco muchísimo el detalle de brindarme esa habitación con una vista excelente. El único inconveniente que le vería a la habitación, es que la regadera es muy pequeña pero fuera de eso, todo es perfecto.
También otros detalles que destaco muchísimo, son el buffet de desayuno, uff, la comida es buenísima, excelente sabor y temperatura de los alimentos y el servicio, ni se diga, te atienden con una gran sonrisa todo el personal desde que llegas, muy en especial Effrain que es una persona sumamente alegre e increíblemente atento, creo que en mi vida había conocido a alguien que atendiera tan perfecto como él, siempre con una gran sonrisa y muy animoso. Sin duda, este es el tipo de personas que le alegran a uno el día.
En el bar también me atendieron bastante bien, muy amables y serviciales y me encantó que tuvieran un buen surtido de bebidas, las cuales pude disfrutar en la agradable terraza que tienen.
Al hacer mi Check-out, todo el personal de recepción me hizo sentir como en casa y más que ese día había tenido un problema personal y era la primera vez que estaba en Aguascalientes e iba de camino a conocer Zacatecas. Me dio tanta emoción al despedirme que no pude contener las lagrimas de lo bien que me hicieron sentir todos ahí en especial, Yaretzi, Aurora, Viri de recepción, Effrain del Restaurante y Felix en el Lobby, al cual consideré un gran amigo, ¡ah que calidad humana! y definitivamente considero este hotel como mi segundo hogar y volveré muchas más veces como me sea posible.
Me gustó tanto hospedarme aquí que sin duda lo considero como el mejor hotel en el que me he hospedado y en el que mejor me han atendido en mi vida
